viernes, 12 de octubre de 2018

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (22)


Mas volvamos al "Eskrull Achispado", estimado lector -gracias, papá-, donde Nos, el Narrador Omnisciente y Arrebatador, habíamos dejado unos cuantos interrogantes sin resolver, a saber:
-¿Se liarían a bolazos de nieve el Hombre Sorbete y Jacobo Frisqui?
-¿Calentarían a base de bien Ilusión y Juanito Tormenta a la Cerilla Humana Original?
-¿Se cumpliría el postulado Spottiswoode-Lobanillos?
-¿Qué pensaba hacer Marlene Milagros de Todos los Santos al respecto?
-Y, sobre todo, ¿acabaría Martinezx calentando la salchicha del Hombre Sorbete?
Interrogantes todos ellos que, mal que nos pese, van a quedar relegados al amargo limbo de las preguntas sin respuesta, justo en el cajoncito entre las interrogativas retóricas y las question tags esas tan raras de los anglosajones. Tú sigue leyendo y verás por qué, pap..., esto, amigo lector.

-Disculpa, Bunny, tío, me ha entrado un mensaje -dijo la Kosa.
-Nada, tranquilo. No sé si pedirme otra cerveza -comentó Bumerang.
Por todo "El Eskrull Achispado" se oyeron alegres y cantarines soniquetes. Todos los parroquianos sacaron sus móviles, incluidos el Hombre Sorbete, las dos Cerillas e Ilusión, quienes parecieron perder las ganas de zurrarse la badana ipso facto.
-¡Por las barbas de mi querida tía Petulia! -exclamó Ben Grima-. No puede ser... ¿A ti no te ha llegado nada?
Bumerang consultó su teléfono.
-No.
-¡Maylin, guapa, ponme aquí veinte jarras de Guinness! ¡Y seis Mort Subite de cereza para mi colega!
Un segundo después, la barra se llenó de clientes.
-¡Siete chupitos de manzana, sin hielo! -solicitó a toda prisa el Hombre Sorbete.
-¡Una botella de orujo del bueno para mí y mi colega Juanito! -pidió la Cerilla Humana Original.
-¡Ocho sol y sombras, rápido! -fue la comanda de Minimus-. ¡Y cuatro carajillos y siete anisetes para la mesa del fondo!
-Maza querer cuarenta y siete absentas negras Hapsburg Gold Label.
-¡Cuatro botellas de Baileys, dos de cazalla, tres de vodka y una de Anís del Mono para la mesa del mus! -pidió Jalactus, abriéndose paso a codazos entre la ansiosa concurrencia.
La familia real antihumana, que también había recibido el guasap, volvió a entrar por la puerta de "El Eskrull Achispado" para tratar de coger sitio en la atestada barra.
-¿Qué pasa? -preguntó Bumerang.
-¿En serio no te ha llegado? -se extrañó la Kosa.
-No, no.
-Qué raro... ¡Ah, claro! Es que no estás en el grupo de tipos con...
-... superpoderes -concluyó Bumerang en voz baja.
-Sí, eso. Jo, tío, qué mal rollo... Va, que te agrego. ¡Eh, Rayao Negro, sin empujar! ¡No haberte ido antes, hombre!

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (21)

Mientras tanto, que ya es decir, Toño Starsky, el Hombre de Lata, sobrevolaba el océano Atlántico, por poner uno bien gordo, en pos de su objetivo, un hombre entregado a una misión, al que ni las procelosas aguas, ni el exceso de comas, le harían desistir de su empeño. Desde su despacho-picadero en Industrias Starsky, su ardiente secretaria Pepi Potes no hacía sino mandarle mensajes de voz picantorros; mas Toño era un hombre que siempre había sabido establecer un orden de prioridades, mal que le pesara a su escroto, y lo que tenía entre manos era mucho más importante que un revolcón a tiro fijo.
Suspirando, el Hombre de Lata metió la quinta y los repulsores de sus talones asustaron primero e incineraron después a una alegre bandada de grullas trompeteras que eligió justo ese instante para extinguirse sobre los plácidos cielos de Wisconsin.
Al poco le entró una llamada en espera.
-¿Aló?
-La mía es más dura que la tuya -se jactó desde el otro lado de la línea Jaime Rodas, Máquina Guarra.
-Cría cuervos y te sacarán los ojos -le echó en cara el Sr. Starsky-. Te regalo una armadura bien chula y así es como me lo agradeces, Jaime, maño.
-Confiesa que tienes miedo de enfrentarte conmigo, Toñete.
El Hombre de Lata apretó los dientes y frunció el ceño, pero con eso de que llevaba el casco puesto, pues como que no se le notó mucho. No estaba acostumbrado a evitar las provocaciones. Y menos por parte de un subordinado. Pero debía tragarse su orgullo por esta vez. "Todo sea por la misión", se dijo.
-Pa´ ti la perra gorda -respondió, colgando acto seguido.

jueves, 11 de octubre de 2018

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (20)


-Tienes los glúteos superduros, tío. ¿Todos los plutonianos sois así?
-Soy el último con vida, así que no sé qué decirte. Por lo demás, colijo que tu extemporánea conducta forma parte de un primitivo ritual de acogida en boga entre los terráqueos del siglo XX -dijo Martinezx.
-Eh... sí, eso -reconoció Robby Drake con cara de tonto.
-¿Mande? -preguntó Jacobo Frisqui.
-Habla así porque viene del futuro... -dijo Juanito Tormenta.
-¡Como la lejía Neutrex!
-Sí, eso. Tiene que sonar raro de cojones o si no, no se lo cree nadie. Esto, Martinezx, una cosa...
-Dime, camarada flamígero.
-Hemos cambiado de siglo.
-Ah. Yo, lo que ponía en las didascalias de mis tebeos...
-¿Dónde? -preguntaron el Hombre Sorbete, Jacobo Frisqui y las dos Cerillas Humanas.
-La didascalia, cartela o cartucho es un espacio rectangular que se emplea para meter texto en una historieta, dispuesto fuera de la viñeta, para dar voz al narrador, entre otras funciones -explicó Martinezx.
-¡Los bocadillos! -exclamó el Hombre Sorbete-. Jo, Martinezx, eres superculto.
-En absoluto, mi frígido y sicalíptico amigo. Los bocadillos integran el texto de nuestros diálogos o pensamientos en la estructura icónica de la viñeta.
-Seguro que puedes enseñarme un montón de cosas -le dijo el Hombre Sorbete al plutoniano. Luego, apuntando a la entrepierna de este-.Oye, ¿lo tienes todo de silicio? O sea, no serás como un heraldo de Jalactus...
-¡NO ME LEÍ LA LETRA PEQUEÑA! ¿Y QUÉ? ¡LE PASA A CUALQUIERA! -gritó Estrella Plateada desde el lavabo de caballeros.
-Venga, sentaos a la mesa, que os invito a una ronda -animó el Hombre Sorbete a los cuatro recién llegados.
-No sé, me siento un poco violento -comentó Jacobo Frisqui-. Tantos superpoderes iguales, la ley de Spottiswoode-Lobanillos y todo eso...
-Pues chico, yo pensaba lo mismo pero mira, con Martinezx, ni frío ni calor. Y como tú no tienes superpoderes...
-¿Qué?
-Que básicamente vienes a ser una nevera de licra con un tío normal dentro.
-¡Huy, lo que me ha dicho!
La Cerilla Humana Original, consciente de la creciente tensión en el ambiente, que no presagiaba nada bueno, se apresuró a intervenir:
-A todo esto, Ilusión, ¿qué tal Guanda? Seguro que le va de MARAVILLA, HOMBRE.
-Tranqui, Ilusión, no entres al trapo -le dijo la Cerilla Humana a este, cogiéndolo del hombro.
-Oye, Juanito, tienes razón. Os cuento un chiste.
-Va.
-¿Por qué la Cerilla Humana no puede ver los termómetros?
-Mmmph -bufó Juanito Tormenta.
-¡Porque son MERCURIO metido en CRISTAL! -La Cerilla Humana Original se dobló de la risa cogiéndose del vientre.
Ya nada podía evitar la confrontación. Nada salvo Martinezx; su mano derecha empezó a caldearse con energía infrarroja, su izquierda comenzó a generar frío.
-Yo... si queréis os puedo enfriar la cola y calentar la salchicha -sugirió el plutoniano.

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (19)


-Cuánto bueno por aquí... -rompió el hielo Juanito Tormenta.
-No sabía que dejaran entrar a clones -soltó la Cerilla Humana Original.
-¿A QUIÉN ESTÁS LLAMANDO CLON? -saltaron Juanito Tormenta e Ilusión al unísono.
-No, hombre, clon, lo que se dice clon, tampoco.
-AH. PENSABA -dijeron Juanito Tormenta e Ilusión a la vez.
-Tú, Juanito, eres más bien un refrito de mi personaje. Y tú, Ilusión...
-¿QUÉ? -dijo Juanito Tormenta, empezando a arder.
-Yo, ¿qué? Mira lo que vas a decir, que nos conocemos -le advirtió Ilusión, cuyo Pedrolo Solar se puso a parpadear en plan semáforo ámbar.
-Cómo no nos vamos a conocer, si yo eres tú. O mejor dicho, tú soy yo.
-La madre que te...
-Oye, que nuestra común e inexistente mamá se merece un respeto.
-Te voy a... -Ilusión hizo ademán de acercarse a la mesa.
-Caballeros, caballeros -intervino Martinezx-. Estoy seguro de que sabremos conducirnos de la forma más cabal y civilizada posible. Al fin y al cabo, ¿acaso no somos todos superhéroes?
-Yo no -apostilló Jacobo Frisqui.
-Bueno, ya -concedió Martinezx-. Exceptio probat regulam.
-¿Lo qué? -preguntó Juanito Tormenta.
-Que una golondrina no hace primavera -aclaró el plutoniano.
-Pues sigo sin pillarlo -dijo Jacobo Frisqui.
-Que somos todos supertipos menos tú y tú te vas a portar chachipiruli.
-Ah, vale. Haberlo dicho.
-Oye, Martinezx, me encanta tu cuerpo, tan cincelado y refulgente y todo eso -intervino el Hombre Sorbete- Es supersexy.
-Oh, muchas gracias, el silicio orgánico es lo que tiene.
-Y parece superduro. ¿Puedo tocarlo?
-Cómo no, amigo. Toca, toca.
-Oye, Martinezx -le susurró al oído la Cerilla Humana, o sea, Juanito Tormenta-. ¿Cuánto hace que no lees tebeos del Hombre Sorbete?
-Jo, tío, tienes los pectorales supercincelados. Se ve que te cuidas... -le comentó el Hombre Sorbete, levantándose.
-Pues llevo un tiempo desconectado, desde que a los Celadores de la Galaxia originales nos sustituyeron por la Mofeta Cohete esa y el Bonsái con patas. ¿Por qué lo dices, compañero?
-No, por nada -dijo Juanito Tormenta-. ¿Cómo lo llevas? Quiero decir, el segundo plano y todo eso.
-A todo se acostumbra uno. De todos modos, estoy en conversaciones con mis antiguos camaradas Carlitos-27, Mikki, Yogur, Halcón Estrellado y Vicente Astral para montar algo muy grande.
-¿Un nuevo superequipo?
-Un Martín Martín. O igual un Foticos.

jueves, 4 de octubre de 2018

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (18)


-¿Qué está pasando en la mesa del Hombre Sorbete y la Cerilla Original? Parece que se han puesto las cosas muy tensas, ¿no? -preguntó Bumerang.
-Es un ejemplo de libro de la ley de Spottiswoode-Lobanillos* -le explicó la Kosa entre trasiego y trasiego de Radler.
-¿Mande?
-Sí, hombre, Bombarang. Mi compadre Juanito Tormenta y la Cerilla Humana Original son calcaos. Ilusión y este último son el mismo androide en distinto cuerpo, o algo así. Jacobo Frisqui es igual de gélido que el Hombre Sorbete. Y para acabarla de enredar, Martinezx el plutoniano te lanza rayos calientes por la mano derecha y frescachones por la zurda.
-No lo pillo.
-Léete la nota del narrador.
-OK... Jodo petaca.
-Sí que está la cosa chunga, sí -coincidió la Kosa-. Y como en "El Eskrull Achispado" no se permiten las peleas, estamos ante una paradoja en plan objeto inamovible-fuerza irresistible.
-Yo es que soy de letras -dijo Bumerang, mordiéndose el labio inferior-. Oye, tengo una duda.
-Dispara.
-¿No estaban prohibidas las peleas aquí?
-Que cuál es tu duda, tronco.
-Antes ha entrado Ojo Falcónido, nos hemos saludado y luego me he acercado a su mesa y hasta me ha hecho un cumplido y todo. ¿No invalida eso la ley esta?
-Es que la ley Spottiswoode-Lobanillos solo se aplica a los supertipos, no a los que...
-... lanzamos cosas -completó Bumerang, sumiéndose en la contemplación del culo de su jarra vacía.
-Huy, perdona, tío, lo he vuelto a hacer -se disculpó Ben Grima.


*Nota del Narrador Omnisciente y Tirando a Guapo: la ley de Spottiswoode-Lobanillos establece que la magnitud "similitud de superpoderes" es directamente proporcional a la magnitud "intercambio de tortas en coscándose". Cuando los poderes son idénticos, la probabilidad de que lluevan josconcios es igual a la unidad.