lunes, 29 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (58)

-Solo una cosa -dijo Duermenmú antes de girarse hacia la entrada del bar-. Las entidades tirando a omnipotentes no pueden participar. Y eso va por ti, Jalactus. Estás preterido.
-¿Lo qué? -preguntó Jalactus.
-Que quedas escaliminao -aclaró el Doctor Rarillo.
-Haberlo dicho en cristiano, hombre.
-Aquí en la Dimensión Negruzca hablan castellano místico, que es una cosa que viste mucho pero luego es un follón cuando entras en cualquier tienda.
-¿Vienes o qué, Maru?
-A ver ese tonito, hermano. Voy a quedarme con Rayao Negro un ratillo. Nos vemos luego.
-Es que no recuerdo el camino de vuelta -le explicó Duermenmú-. Con eso de que nuestra Dimensión es infinita y tal, uno se pierde a la primera de cambio. Tenemos que poner señales esotéricas un milenio de estos.
-Tú siempre tan aguafiestas, Dormimú.
-Te tengo dicho que no me llames Dormimú en público, Maru. Que luego se corre la voz y pierdo devotos a cascoporro.
-Luego te pongo un guasap, Rayi, guapo -se despidió la Maru.
-¿No te vas tú con ellos, cariño? -preguntó Rarillo.
-Por supuesto que me voy. A casa de mi madre. Tú quédate aquí de farra tan ricamente con tus amigotes -le contestó Anac... su señora esposa, dando un portazo.
-Es muy mal perdedor de mus -les hizo saber a todos Jalactus.
-En fin... -resopló el Doctor Rarillo-. Mi sapiencia arcana y el hecho de que me haya leído las galeradas astrales de esta historia me dicen que Duermenmú se contentará con tres Pedrolos del Infinito...
-En eso habíais quedao, ¿no? -dijo Ben Grima.
-... cuya ubicación me ha sido revelada igualmente. ¡A ver si no interrumpimos, por los Hijos de Satannishio!
-Un poco de respeto, jolines -le reprochó Damián Hellstrap.
-Se me chispoteó, maño. Como iba diciendo...
-¿Dónde están los tres Pedrolos? -quiso saber la Kosa.
-¡En el nombre del horrible Duermenmú, déjame terminar, rocoso ígnaro!
-¿Qué me ha dicho?
-Castellano místico, fijo -comentó Bumerang, sacándose su móvil del bolsillo.
Del otro lado de la puerta se oyó atronadora la voz del señor de la Dimensión Negruzca:
-QUE NO ESTOY TAN TENIENTE COMO CREES, ESTÍPTICO SOBRINETE. Y PA´ GUAPO, YO. UN POCO DE POR FAVOR.
-Yo antes también tenía problemas de tránsito, pero desde que tomo Fave de Fuca la cosa ha mejorado un montón -le dijo Bumerang a Rarillo tras consultar el traductor de Google en su Huawei Villain de gama básica.

sábado, 27 de julio de 2019

Antología de relatos de ciencia ficción: "Sueño de solo estrellas"


Aquí tenéis mi antología "Sueño de solo estrellas", que incluye los siguientes relatos:

-'T´ayl-Siempre-Fría': la eterna lucha de dos infrapersonas nacidas de tortuga por poder concebir un hijo sin el permiso de los hombres y de su Horneadora.

-'Sueño de solo estrellas': Lordtune el Émpata despierta de su letargo de decenios en el desierto de Kirlianni. Dos infrapersonas gatunas huidas de la capital, Gheorghieni, pugnan por sobrevivir. Él sabe que serán capturadas de nuevo y que ayudarlas le causará dolor...

-'Donde el Viejo-Sin-Nombre': Bid Onville, Señor de la Instrumentalidad, viaja al remoto planeta Kirlianni para descubrir el secreto de su aislamiento... y el destino de Lordtune.

Y la opinión de Nana: "Un conjunto delicioso de relatos de ficción. Tienen un no-sé-que muy adictivo que casi te hace desear algunas páginas más, aunque sean estupendos con la longitud que tienen; la forma de hilar los relatos es sutil pero muy clara, y demuestran una mente vasta y creativa."

viernes, 26 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (57)

-¡Tenemos que hacer que vuelvan! -clamó Bumerang, las manos en la cabeza.
-A ver, tampoco es que corra tanta prisa -lo tranquilizó Ojo Falcónido-. Otro rato le pago a Minimus por sus servicios y listo. ¡Marlene, ponme un bocata de tortilla! De los gordos. Y una jarra.
-Yo a Julk tampoco lo voy a echar mucho de menos -reconoció Ben Grima-. Si es que ese pavo me puede...
-Pero, ¿y Dedusa? -preguntó Bumerang-. ¿Señor don Rayao Negro?
El monarca antihumano se excusó sin palabras ante la Maru y se puso a escribir un rato en su pizarrín antes de enseñárselo al doctor Rarillo.
-¿Cuántas posibilidades hay de que vuelva Dedusa? -leyó Esteban Rarillo-. Si son "muchas": "Oh, ah, cuán terrible desgracia. Vayamos en pos de mi amada." Si son "pocas": C´est la vie. Ya me disculparás, debo proseguir mi animada charleta con esta señorita tan agradable".
-Hombre, no hay que desesperar -intentó calmarlo el maestro de las artes esotéricas esas.
-Si es que es más majo... -dijo la Maru.
-¿Y el Caballero Lunático? -preguntó Bumerang a una concurrencia de pronto silenciosa-. Ah.
-Oye, Burpy, amiguete, vente p´acá -le dijo la Kosa.
-¿Sí?
-¿Cómo es que te has ofrecido a colaborar en lo de la colecta con Flecha Rijosa?
-Ha sido mi primer crossover. De aquí a tener serie regular solo hay un pasito -le explicó un exultante Bumerang.
-Ya veo.
En estas volvió Duermenmú, que había hecho mutis por el foro un momentico antes pero igual no lo hemos dicho.
-Que dice el señor Huang que los pebeteros están a dieciséis euros con cincuenta.
-¿Entonces te llega con lo recaudado, oh, perversa entidad preternatural y querido tío?
-Sí, pero no me queda ni para un bocadillo. Así que no hay trato.
-¿Qué quieres pues a cambio de respetar esta sacrosanta ubicación habitualmente colmada de bebidas espirituosas? ¿Algún objeto de inmenso poder?
-Como los Pedrolos del Infinito, ¿no? -comentó Bumerang-. Lo leí en un tebeo.
-Te van a borrar del grupo de Guasap, Busty, tío.
Duermenmú echó una ojeada de reojo a la Maru, que esta no devolvió con eso de que estaba un poco liada con Rayao Negro.
-Eh... sí... eso. Pedrolos del Infinito.
-¿Cuántos quieres? -quiso saber Esteban Rarillo.
-Yo... ¡seis mil! Sí, eso. Seis mil está bien.
-Igual son muchos.
Duermenmú volvió a mirar a su hermana, que seguía pelando la pava a conciencia.
-¿Qué tal si lo dejamos en dos o tres? -propuso Rarillo.
-Vale, despreciable sobrino político -Duermenmú levantó la llameante palma-. Gimme five!
-No, no, el Doctor Rarillo ha dicho que un par o tres, señor don dios malvado -aclaró Bumerang.

jueves, 18 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (56)

-¿Cuánto hemos reunido, amigo tiraflechas? -preguntó el Doctor Rarillo nada más terminar la colecta.
-Lanzaflechas. Es lanzaflechas. Un poquito de respeto, oiga -le reprochó Oliverio Reina.
-Diecisiete con cincuenta -le hizo saber Bumerang.
-Poca cosa es, por los Guishanti.
-En realidad, diecisiete con cuarenta y ocho, solo que lo he redondeado hacia arriba por la cosa psicológica esa -admitió Bumerang.
-¡Por las peludas huestes de Cerdogodo! ¿Vais a dejar que estas dos criaturas sobrenaturales, aunque sean familia política y les asista la ley, nos quiten "El Eskrull Achispado"? -se alborotó Esteban Rarillo.
-Es que la gente está sin pasta -le informó Bumerang.
-¿Y eso?
-Dicen que había que hacer acopio de priva como fuera antes de que viniera el Hombre de Lata.
-Bueno, ya.
-Yo no he puesto ni un céntimo. Que conste -dejó caer Toño Starsky-. Encima de pelandusca pongo la cama, si os parece.
-Servidor no vuelve a venir aquí. Menudo bochorno -se quejó Damián Hellstrap-. Los dos euros que tenía para el tranvía, no hay derecho.
-Yo estoy pelao -se excusó Martinezx.
-Te ves muy guapo así -le piropeó el Hombre Sorbete.
-Tenga usted, señor don Duermenmú -se adelantó Bumerang con el dinero.
-Ah-ah. Estimado homúnculo desprovisto de poderes y con dudas existenciales, con eso no nos llega ni para un pebetero en condiciones, ¿verdad, Maru? ¿Maru?
-En "El Tlébol Sueltudo" los tienen bien baratos -aseguró Jocaspa-. Pregúntele a Zorrezno cuando lo vea en la calle.
-No seas plasta, hermanito. ¿No ves que estoy hablando con este señor mudo tan guapo todo vestido de negro y con la antenita de electrones en la frente?
-¿Eh? Ah, vale -dijo Oliverio Reina tocándose la oreja-. Oye, Matasanos Forano, que tengo al Doctor Feta hablándome por el pinganillo.
-Hum. Vaya. ¿Y qué dice ese voluntarioso advenedizo de lo arcano?
-Dice que te está oyendo en Dolby Surround por su bola de cristal y que entre bomberos no se pisan la manguera, que está muy feo invocar a supertipos como yo de su universo sin permiso. Y que a Chthon vas, por listo.
-Supertipo, supertipo, tampoco -terció Ben Grima-. Que solo tira cosas. Perdona, Busby, colega, tenía que decirlo. Rarillo no me mola, pero es mi hechicero de cabecera cuando la cosa se pone chunga.
-Ya veo -el Doctor Rarillo se puso a hacer gestos místicos como quien no quiere la cosa a la vez que lanzaba una mirada de reojo a Satán Jr., quien se pispó enseguida.
-¿Has visto qué portal tan chulo acaba de salir ahí a tus espaldas, Saeta Glauca?
-A ver... -dijo Oliverio Reina, girándose-. Pues sí que es bonito, sí...
-¡Hala a escaparrar! -gritó Damián Hellstrap, propinándole un empellón al lanzaflechas con complejo de Robin Hood.
Minutos después de que Flecha Rijosa desapareciera por el portal conjurado por el Doctor Rarillo, la Kosa fue el primero en preguntar:
-¿Dónde están Dedusa, Minimus, Julk y el Caballero Lunático?
-No hay problema, amigo Grima.
-¿No?
-Tengo el hechizo en garantía. Me reembolsan el dinero, por estas -afirmó el Doctor Rarillo, tironeándose de la barbita.

lunes, 15 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (55)

-Eh... esto... hola. Oliverio Reina, para servirles -se presentó Flecha Rijosa, descubriéndose la rubia melena.
-¿Dónde están Julk, Dedusa, Minimus y el zumbao ese de la capucha blanca? -preguntó Ben Grima.
-El sortilegio del Faralá requiere cinco personas implicadas -explicó el Doctor Rarillo-. Efectos colaterales, fuego amigo, seguid sin mí, salvad al soldado Ryan y todas esas cosas.
-Igual podías haberlos avisado, digo yo.
-Igual, pero entonces no habrían querido. Lo arcano es lo que tiene: a veces hay que sacrificarse y no todo el mundo se lo toma de buen talante.
-Ya. Visto así -convino la Kosa.
-¿Dónde estoy? Ah... ya veo. Eh -saludó Flecha Rijosa.
-Eh -devolvió el saludo Ojo Falcónido.
-Eh -hizo otro tanto Bumerang.
-Oye, ¿tú eres el Galeno Extrañao, no? Te he visto en los tebeos. En el escaparate del quiosco en el rincón de los invendidos, quiero decir.
-Rarillo. Doctor Rarillo.
-¿Qué tal, Flecha Rijosa? Mucho gusto -se adelantó Bumerang, tendiéndole la mano.
-Tú tienes pinta de tirar cosas, pero no me suenas.
-Tenemos que hacer equipo por una causa más importante que todos nosotros. ¡Tiracosas, reuníos!
-Hombre, pues es una gran oportunidad: desde que me mataron en los 90, como que no ha sido lo mismo. ¿De qué se trata? ¿Algún imperio galáctico en apuros? ¿Un gerifalte cogido de rehén por el maloso de guardia? ¿La charanga del barrio mete mucha bulla? ¿Algún gatito en la copa de un árbol?
-Tienes que pasar la gorra -aclaró el Doctor Rarillo.
-Hombre, como tarea superheroica mucha enjundia no tiene.
-Solo tú puedes hacerlo.
-Hombre, eso ya es distinto. Hace falta alguien con mi don de gentes, mi temple ante las negativas y mi pulso firme de arquero sin igual.
-Bueno, sí. Y una gorra, más que nada. Aunque sea verde y con plumita -aclaró Esteban Rarillo-. No hay ni Cristo en toda la taberna que vista así de rid...
-¡Adelante, amigo! Yo te acompañaré en esta misión -se ofreció Bumerang ante la cara de pasmo de la Kosa.
-Bueno, va, al tajo. ¿Qué ibas a decir, Matasanos Foráneo?
-Rarillo, Doctor Rarillo. Iba a dec... ¡uuummmf!
-Mucho arcano, mucho arcano pero eres más torpe que un ladrillo, colega -le dijo Grima al oído.
Flecha Rijosa y Bumerang comenzaron a pasar la gorra, en plan cepillo de iglesia, entre los embarazados clientes de "El Eskrull Achispado".
-¿Un eurillo suelto para la causa, por caridad? -preguntó voluntarioso Flecha Rijosa al primer parroquiano envuelto en sombras que pilló.
-Dios se lo pagará -añadió Bumerang.
-En el Club de la Pira Inferna no pasaban estas cosas. Esto es muy incómodo, jobar -se quejó un sonrojado Damián Hellstrap, Satán Jr. para los amigos.

Lo estamos dando, lo estamos regalando...

Hola a todos, simpáticos amiguetes:

Para celebrar que pronto llegaremos a las 10.000 visitas en el blog, la primera persona que comente algo en él nada más llegar a esa cifra, se llevará por la patilla un ejemplar de mi novela de despiporre intergaláctico: "Forastero en cuerpo extraño". 245 páginas despendoladas muy en la vena de "El Eskrull Achispado", en papel y todo, oiga.

Gastos de envío a Spain incluidos. Un día es un día, recórcholis.

No cuentan como comentarios cosas del tipo: "Mola", "Vaya caca", "Qué bueno lo tuyo, sobrino", "Hestá mui jracioso" o "Tenemos el préstamo que usted necesita". Aquí el menda se reserva el derecho de decidir si el comentario sirve o no.  Las posibles reclamaciones al respecto serán debidamente atendidas por el maestro armero XDDD...

Hala, ya tardáis en comentar, majos :).

domingo, 14 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (54)

-Pues estamos listos -se lamentó Ben Grima.
-¿Para la colecta? Ya era hora -dijo Esteban Rarillo.
-¿Y quién pasa la gorra? -preguntó Bumerang.
Los veinte mil clientes de "El Eskrull Achispado" guardaron un respetuoso silencio.
-Yo no -dijo la Kosa por fin.
-Yo menos -comentó Estrella Plateada-. Es que es muy violento.
-Hace falta tener pelotas -dijo Ojo Falcónido desde su mesa.
-Tampoco hay que hurgar tanto en la herida, jopé -se quejó Estrella.
-No sus preocupéis, dejadlo en manos del círculo de los siete hierofantes místicos. Bueno, seis, que el señor de Burgos iba con mucha prisa y al final se tuvo que ir.
-¿Os vais a reunir otra vez en el plano astral para soltar sandeces? -preguntó Madame Güeb.
-No, ya lo hemos hecho. O sea, menos lo de las sandeces. La presciencia es uno de los muchos dones que nos adornan, sobre todo a mí.
-A ver si adivinas quién te va a acabar dando un sopapo -le sugirió Grima.
-Tras arduas deliberaciones, Hermano Yuyu, Daga de Alpaca, Majica, Pesadillo, la Bruja Escarchada y yo hemos decidido quién debe encargarse de recoger las aportaciones.
-¿Quién? -preguntaron un montón de parroquianos curiosos.
-Flecha Rijosa.
-¡No j...! -se escandalizó Ben Grima.
-¡Hasta ahí podíamos llegar! -abundó con algo más de detalle Ojo Falcónido, cayéndose de espaldas con silla y todo.
-Ojo Falcónido es mejor que Flecha Rijosa de aquí a Roma. Y yo soy mejor que Ojo Falcónido, que me lo ha dicho él.
-¡Si no queríais ser nadie! -se extrañó el Doctor Rarillo.
-Pues haberlo hecho a pito pito gorgorito, hombre -dijo Juanito Tormenta desde la mesa de congelados y churrascos.
-Cualquier cosa antes que alguien de la competencia -añadió Carnac-. Voy a dejar de comer nueces, ya está bien.
-Cura sana, cura sana... -canturreó Jocaspa, cogiéndole la mano.
-No se puede ir contra los designios del destino, ea. Dedusa, Maza, Minimus, Hombre Kosa, ¿os importa poneros aquí? Bien juntos.
-¿Es para foto? -preguntó Julk.
-No me simpatizas, Minimus -aclaró Dedusa, antes de pasarle el pelo sobre los hombros.
-¡ARRGGGGHHHHH! -chilló Minimus, soplándose como loco la palma derecha.
El Hombre Kosa puso cara de no haber sido él quien había tocado a Minimus.
-Muchas gracias, doctor Sillas, ya puede usted sentarse -dijo Esteban Rarillo-. ¿Algún voluntario para sustituirlo?
-Yo mismo, qué canastos -se ofreció el Caballero Lunático, saliendo de entre las sombras.
-¡Por los colmillos del Faralá, vente p´acá!
Acto seguido, un umbral de colorines de esos muy chulos como en las pelis se abrió, tragándose a Dedusa, Minimus, Julk y el Caballero Lunático y escupiendo después a un aturdido Flecha Rijosa.

sábado, 13 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (53)

-Nos estamos yendo un poco del tema, superheroicos amigos mundanos -intervino el Doctor Rarillo.
-¿Qué tema? -se interesó Ben Grima.
-La colecta.
-Ah, sí. Yo es que no lo veo.
-Eso es porque no estás versado en las artes místicas como un erudito servidor.
-Sí, va a ser eso -bufó Grima.
-¡Eureka! -exclamó Bumerang.
-No sabía que fueras vasco, Bubu, colega.
-No, si soy australiano. Quería decir que...
-Como experto versado en lenguas muertas y pachuchas, me permito sacarte de tu atrevida ignorancia, compañero Ben Grima: aquí el amigo habla un simpático dialecto pama-ñungano, una mezcla criolla entre el baagandji y el yardliwarra. Me atrevería a decir y acertaría que es del mismo pueblo que mi colega aborigen Portalico. Antes charrábamos mucho por Skype pero acabé cansándome porque siempre andaba medio dormido.
-No, no, si yo solo...
-Sería la diferencia horaria -intervino Estrella Plateada.
-Una falta de respeto es lo que era -aseguró el Doctor Rarillo.
-Mira quién fue a hablar -soltó Madame Güeb-. El que te deja colgada en plena partida de mus.
-Eso es griego -aseveró Jalactus, en vez de asegurar como un mortal cualquiera.
-¿Cómo lo sabes? -le preguntó el Doctor Rarillo.
-Hice el COU de letras -le explicó Jalactus.
-Ah. Mecachis -se sonrojó el maestrillo de las artes místicas.
-Oye, Rarillo, ¿por qué te pones la máscara esa negra? -se extrañó la Kosa.
-Por razones esotéricas. No lo entenderías.
-¿No?
-No.
-Pa´ ti la perra gorda -concedió Grima- ¿Qué querías decir, Bulbul, colegui?
-¿Eh? Ah, sí. Que no hace falta hacer una colecta. Tengo la solución.
-¿Tienes pasta?
-Yo no, pero otros sí. A ver, ¡levantad la mano los que estéis forraos!
De mala gana, ante la mirada atenta de los veinte mil parroquianos de "El Eskrull Achispado", dos brazos se alzaron.
-No pienso aflojar ni un céntimo -se ufanó Toño Starsky, el Hombre de Lata-. Como mucho, invito a una ronda de zarzaparrilla.
-Eso no se hace. Cuánto resquemor, hombre -comentó la boca correspondiente al segundo brazo que se había levantado, ambos propiedad de Kike Richimondo, el Halcón Parrandero.
-¡Estamos salvados! ¡Tres hurras por el Halcón Parrand...! -comenzó a exclamar la Kosa.
-Eh, que yo no he dicho que fuera a soltar la gallina, ojo -lo interrumpió Halcón Parrandero.

martes, 9 de julio de 2019

Cuentos de "El Eskrull Achispado" (52)

-Pa´ semejante viaje no hacían falta alforjas, Rarillo -le echó en cara Ben Grima.
-Yo seré inmortal, pero se me está agotando la paciencia, miserable sobr... hechicero -le advirtió Duermenmú, que llevaba un porrón de rato acodado en la barra al lado de Bumerang.
-Y usted que lo diga -coincidió Bumerang-. Seguro que tiene montones de cosas místicas que hacer.
-No te creas, patético humano infrapoderoso. Con eso de que en la Dimensión Negruzca uno no tiene más que chascar los dedos y le brotan siervos Descerebraos de debajo de las piedras, pues como que llevo la agenda muy al día. Mas tu empatía es refrescante, para variar.
-Eso, tú ponte a confraternizar con parias en vez de meterle prisa a tu sobrino. Mentira me parece que seas hermano mío -le reprochó la Maru a Duermenmú.
-Eso ha dolido... -Bumerang reparó en la mirada de la Maru-, pero vamos, que lo que usted diga, señora, faltaría más.
-Oye, no te metas con mi despreciable amigo. Que pertenezca a la casta más baja de los superhéroes, dada su evidente y completa falta de poder, no te da derecho a recordarle su condición de absoluto paria...
-Esto, ¿gracias? -dijo Bumerang.
Duermenmú, envalentonado acaso tras las cuatro Mort Subite que acababa de trasegarse por cortesía de la Kosa, se lanzó a la piscina:
-... y si no recuerdo mal, de tanto confraternizar con Orín, a ti te salió una Anacleta.
-¡Huy lo que me has dicho! ¡A papá vas por faltón!
-Otro que tal baila -bufó Ana---.
-Y yo confraternizo con mi patético colega las veces que quiera. Es más, me lo confraternizo si hace falta, córcholis.
-No, gracias -declinó amablemente Bumerang.

En la mesa donde se sentaban las dos Cerillas Humanas, Robby Drake, Martinezx y Jacobo Frisqui, y que en adelante denominaremos "mesa de congelados y churrascos" en aras de la brevedad, el Hombre Sorbete dejó caer con rictus rijoso:
-Este entiende pero fijo.
-No entiendo -comentó Martinezx.

-Y aún diré más: me conmueve tanto la deplorable condición de mi astroso amigo... ¿Cómo decías que te llamabas?
-Burundang -le recordó Ben Grima.
-Eso, Burulan. Me conduelo hasta tal punto de tu lastimoso estado de infrahéroe que voy a otorgarte unos poderes que lo flipas.
-¿EN SERIO? -preguntó con mayúsculas y todo Bumerang- ¿Qué poderes?
-Controlar las llamas y volar, así para abrir boca. E invocar seres místicos con mala baba de postre.

En la mesa de congelados y churrascos la cosa se puso tensa:
-¿Otra Cerilla Humana? -clamaron al unísono ambas Cerillas.
-Hasta ahí podíamos llegar -se ofendió Juanito Tormenta.
-Con lo que me alegré cuando la diñó mi compinche Tomás Raimundo, el Torete. Que andábamos todo el día a la gresca, llama va, llama viene -dijo la Cerilla Humana Original.
-La ley de Spottiswoode-Lobanillos es lo que tiene -sentenció Jacobo Frisqui.
-Ya salió el listo -dijo el Hombre Sorbete.

-Oye, pues no suena mal, amigo Duermenmú. ¿Puedo tutearte?
-Poder, lo que se dice poder, puedes. Pero con eso de que soy un dios, igual se me va la pinza, olvido nuestra sólida amistad y te reviento un poco.
-¿Decía usted?
-Te concederé poderes superiores a los del Doctor Rarillo y mi sobrina Anacleta juntos.
-Cuando dejes de ser dios te vas a enterar -le advirtió la esposa del maestrillo de las artes místicas (por no decir Ana---).
-Pues pinta muy bien la cosa. ¿Cuándo nos ponemos a ello?
-De inmediato. Solo tienes que condenar tu alma a servirme eternamente en la Dimensión Negruzca cuando mueras, que intentaremos que sea pronto, y te enchuclo los poderes en un pispás.
-Igual me lo pienso un poco -dijo Bumerang, rascándose la barbilla.

domingo, 7 de julio de 2019

Permanezcan atentos a sus pantallas...

¡No estaba muerto, que estaba de parranda! En cuanto la amable Kosa de ojos azules se despierte, retomaremos "El Eskrull Achispado". Palabrita del niño Jesús.